El cumpleaños de mi hijo mayor este año, como ya sabéis, ha sido una fiesta pirata. Lo pensamos el año pasado, y desde verano vamos preparando su organización. Lo terminamos de decidir viendo la fiesta que Vicky Ortiz le preparó a su hijo, y con mucha generosidad me mandó ideas y material. Entre lo que me mandó ella, lo que vimos por internet, y lo que pusimos de nuestra cosecha, salió una fiesta vistosa y divertida. No sé quién ha disfrutado más, si Pablo viviendo los preparativos y la fiesta, o yo organizándola.
Lo primero que preparamos fueron las invitaciones, que serían un mapa del tesoro en una botella. Para ello pedimos al abuelo que nos guardara las botellitas de casera, todas iguales, y en verano, en la playa, recogimos piedrecitas para meterlas dentro. Diseñamos y mandamos imprimir las pegatinas de las botellas, y la invitación del interior. También gorros piratas para los niños, carteles para el nombre de las comidas, banderitas piratas, cartel de bienvenida... Para los que no trajeran disfraz, preparamos unos con bolsas de basura y tela roja. Hicimos de globoflexia espadas piratas.
La fiesta se celebró en el Centro Infantil Patucos, un lugar estupendo, preparado para nos niños, espacioso, y con sitio fuera para los buenos días. Agradecidos especialmente a Silvia y Alberto, que siempre están para "soportar" nuestro inventos...jijiji.
Para la fiesta, la compañía Kaos Teatro, nos prestó a "Huesitos", y el cofre del tesoro.
En cuanto a la comida, hice un barco pirata de chuches y un expositor de cupcakes con unos dummies estupendos que vende Juan, de porexcut.com. El barco totalmente recubierto de golosinas, y el expositor forrado de cartulina y postales de "Bienvenido a mi fiesta pirata". Con las latas que se me iban gastando de la leche de mi hijo pequeño, hice botes piratas para las servilletas y cubiertos. En el menú, cupcakes de zanahoria y nueces, magdalenas con buttercream de nutella, hojaldritos de jamón y queso, bocaditos de atún, el barco de chuches, la gran tarta pirata y una mousse de limón estupensa y riquísima, que se me quedó en el frigo porque me olvidé de sacarla...:(.
Mi pareja, Pepe, se encargó junto a su hermano Nando de la animación y los juegos para los niños. Aunque Huesitos causó alguna que otra una lágrima, los niños se lo pasaron bien en la emocionante experiencia.
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| Botellas invitación |
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| Expositor cupcakes |
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| Invitaciones piratas |
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| Interior invitación |
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| Botes servilletas |
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| Reverso invitación |
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| Espadas piratas |
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| Trajes piratas reciclados |
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| Mousse de limón |
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| Cupcakes de zanahoria y nueces |
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| Magdalenas con buttercream de nutella |
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| Mesa |
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| Tarta pirata |
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| Barco chuches |
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| Huesitos |
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| Cartel bienvenida |
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| Banderines piratas |
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| Gorros piratas |
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| Tarjetas menú |
Tener sólo hijos varones tiene, entre otras consecuencias, una separación práctica de por dónde van los gustos femeninos hoy día...Menos mal que ya están las hijas de las amigas para ponernos al día... En fin, que me uno a la moda, parece ser, con esta tarta de las Monster High, que espero que despierte la sonrisilla de una niña preciosa que cumple 5 años. Felicidades Claudia!!
Muy fácil hacer un expositor de cupcakes divertido, original y casero. Compra unos dummies que se lleven entre ellos mínimo de 10 cm (si son 15, mejor). Y que sean altos. Colócalos unos encima de otro, buscando primero el centro para que queden simétricos. Ensártalos con brochetas. Cúbrelos con aros de cartulina con la parte visible de cada uno (en el que se apoyan los cupcakes). Y el perímetro de los mismos cortando una tira de cartulina y enrollando. Pégalos con gotas de pegamento (yo usé pegamento en pistola caliente, pero echándolo en la cartulina, no de primeras directamente en el dummie porque se lo come). Pon pocas, para poder reutilizarlos para otras fiestas temáticas. Decora con pegatinas, posavasos, etc, según tema. Queda precioso!!!.
Tener un bebé en casa implica una acumulación de cosas extras (seguramente la mayoría de las que estáis leyendo esto estáis asintiendo inconscientemente con la cabeza...jijiji). Muchas van pasando a mejor vida sin pena ni gloria, pero a algunas podemos sacarle partido. Mi hijo pequeño aún toma leche infantil, y la que nosotros usamos viene en latas. Para la fiesta pirata de mi hijo mayor se me ocurrió usarlas. Las lavé muy bien, guardé la tapa metálica y tiré la de plástico. Con cartón corrugado negro las forré, pegándolo con una pistola de pegamento caliente a la lata. Luego recorté una calavera y la pegué. 
